La pandemia de Covid-19 dejó a muchas empresas en una situación crítica. Algunas se vieron forzadas a cerrar sus puertas, mientras que otras tuvieron que recurrir a recortes significativos en su personal. En momentos de insolvencia financiera, el concurso mercantil se alza como una herramienta legal vital.
¿Qué es el Concurso Mercantil?
Este procedimiento, contemplado en la Ley de Concursos Mercantiles, permite a las empresas abordar su insolvencia de manera organizada. Carlos Olvera, socio de Santamarina y Steta y experto en reestructuras y concursos mercantiles, explica que para calificar para este proceso, la empresa debe tener al menos dos acreedores diferentes con cuentas pendientes por más de 30 días o ser incapaz de liquidar al menos el 80% de sus pasivos con todos sus activos.
Pasos del Concurso Mercantil
Cuando una empresa entra en concurso mercantil, se detiene el pago de todas las deudas y la acumulación de intereses, con algunas excepciones. Además, no se pueden ejecutar sentencias o embargos, hacer pagos a terceros ni afectar la propiedad de la empresa.
El proceso comienza con una visita que verifica el incumplimiento generalizado de pagos. Un visitador experimentado en contabilidad y finanzas es designado para esta fase.
La etapa de conciliación involucra alcanzar un acuerdo de pago entre la empresa y sus acreedores reconocidos. Un conciliador con experiencia en finanzas y reestructuración guía esta fase.
Si, a pesar de los esfuerzos, la empresa no puede recuperarse, se declara en quiebra. En esta etapa, los activos de la empresa se venden para pagar a los acreedores reconocidos. Un síndico administra este proceso, asegurando la máxima recuperación de activos y distribuyendo fondos a los acreedores.
El concurso mercantil brinda un marco legal que permite a las empresas en aprietos reorganizarse y encontrar soluciones para su situación financiera. Es una herramienta importante que ha sido fundamental, especialmente en estos tiempos desafiantes.
Comments